En esta oscura noche, mientras todos beben y se ríen de sus estupideces, miro el cielo estrellado que se alza sobre mi cabeza y me pregunto; Si me vuelvo lo suficientemente alta ¿Podría alcanzarlas? No, eso es una tontería, nadie es tan alto ¿Y si salto? No, nadie puede saltar tanto ¿Y si vuelo?

Aquella idea fue mi único pensamiento por lo que parecieron horas ¿Cómo podría yo volar? No tengo alas, ni tampoco alguna de esas máquinas voladoras que mi padre había intentado con tanta desesperación crear, cuando aún estaba con vida ¿Entonces... Que haría? ¿Cómo llegaría a ellas?

La voz de mi madre apareció en mi mente, trayendo consigo viejos recuerdos de las noches en las que me contaba cuentos sobre personas con alas de mariposa, unas llamadas "hadas". Solía decir que tenían forma humana, hasta que un día caían desde gran altura y, mientras descendían, unas bellas alas crecían en sus espaldas y los salvaban de su horrible final.

Me había olvidado de aquellos cuentos, quise olvidar todo sobre ella después de que se suicidó saltando desde el balcón de la que era nuestra casa hace seis años, sobre todo cuando, un mes después de su muerte, mi padre siguió sus pasos suicidándose, solo que él lo hizo desde una mayor altura. Aún no he podido olvidar las palabras que me dijo aquel día antes de irse para siempre.

-Volveré cariño, pronto seremos una familia otra vez y ya nada nos separara... - Por su rostro enrojecido corrieron dos lágrimas que borró a toda prisa, mientras se iba.

Aparte de mi mente todo recuerdo de ellos, no puedo evitar creer que son los causantes de todo esto, de los gritos, los golpes y las "caricias" que me da mi nuevo padre y sus amigos cada vez que mi nueva madre sale de casa ¿Acaso será así siempre? ¿Estaré condenada a vivir con aquellos monstruos? Dos lágrimas se deslizan por mi rostro, tan calientes que pueden quemar el alma, justo como las de mi padre aquel día en que me abandono, solo que yo no las seco, las dejo caer una tras otra mientras miro las estrellas, mi única compañía.

Fuertes golpes a la puerta me obligan a apartar la vista de ellas, el hombre al que debo llamar padre grita desde el otro lado obscenidades que no logro entender y sus amigos ríen a la vez que agregan más comentarios que realmente no quiero escuchar, cada vello de mi piel se eriza cuando él golpea más y más fuerte.

-No... -susurro.

Todo mi cuerpo tiembla con desesperación, miro mi pequeña habitación en busca de algo con que defenderme aunque sé que es una pérdida de tiempo, nada me salvará ahora, ni nunca. Me cubro la cara con las manos llorando y suplicándole a gritos que se vaya, pero él sigue golpeando la puerta, gritándome que abra, que lo deje entrar. Realmente no quiero hacer eso.

Miro a las estrellas esperando a que ellas me salven, aunque sé que eso no es posible. Entonces lo recuerdo... Recuerdo un lugar al que nadie me seguirá, nadie podrá hacerme daño allí.

Me secó las lágrimas con las manos, debo ser fuerte ahora. Abro la ventana viendo el extenso bosque que rodea la casa el cual he recorrido muchas veces durante estos seis años. Los gritos de aquella bestia ya exasperada y los golpes que da contra la madera es lo único que puedo oír, lo último que oiré.

Me adentro al bosque corriendo con aquellos sucios hombres de piel sudada, comentarios obscenos, aliento fétido con sabor a alcohol y pegajosas manos pisándome los talones, algunos divertidos por tener que perseguirme, otros enfadados por tener que tratar conmigo.

Con cada paso que doy me acerco más a mi destino, menos hombres me persiguen y los que aún lo hacen no muestran diversión alguna por la persecución. Mis piernas apenas pueden seguir, pero no puedo parar, ahora más que nunca debo olvidarme del cansancio y el dolor para poder seguir adelante.

Después de correr por todo el bosque, consigo por fin lo que estaba buscando, un gran abismo se extiende ante mí, la altura más grande que había visto en mi vida. Una sensación increíblemente placentera crece dentro de mí, deseo saltar no solo para acabar con mi vida, si no para volar, para que mis alas crezcan y me salven de mi destino... Tal vez sea cierto, tal vez pueda ver a mis padres de nuevo. Ellos deben estar allí, volando en el cielo, esperando a que los siga.

Me doy vuelta, unos pasos se escuchan cada vez más cerca, deben ser ellos, los demonios que me persiguen para llevarme a lo más profundo del infierno. No lo pienso más, no hay nada que pensar, solo salto. Salto y luego caigo, espero a que mis alas crezcan y me salven, pero no lo hacen. Mi cuerpo es dominado por el miedo, tenía razón. Nada me salvará ahora.

Gueni que cosa tan triste esta que escribís, es muy linda por un lado y tan triste por el otro...
Locierto es que en temas de redacción lo único que te diría es que se me confuncio un poco cuando hablaste del bosque y derrepente ya estaba ahí,

Más allá de eso, a pesar de que este todo muy bien sea fuerte y bien redactado cuando se pregunta -apesar de que luego se aclara que es a intención de escapar- lo de las estrellas me hizo feliz y me saco una risa y creí que la historia ívase por ahí en una trama más divertida y ligera (aunqué el humor es lo más profundo de todo) y me parecía una mejor idea.
No obstante cadq cual escribe lo que quiere escribir y me hace preguntar porque justo esto vos,


Felicitaciones ppr un texto trágico y hermoso

Juanse

Buenas noches.

Bueno, en particular no creí que la historia iba a ser divertida en ningún momento, pero sí me agradó. Esa melancolía que te pueden generar esta clase de tragedias y que es inevitable; sobre todo el destino de su madre que quién sabe qué cosas pasaban por su cabeza y el desesperado intento de su padre por alcanzarla pero con toda consciencia de lo que hacía, a diferencia de su madre ¿o me equivoco?
Creo que tiene potencial. Es un buen comienzo en este estilo de género realista.

Un saludo, espero te sirva de algo mi mensaje.

Citación :

En esta oscura noche, mientras todos beben y se ríen de sus estupideces, miro el cielo estrellado que se alza sobre mi cabeza y me pregunto; Si me vuelvo lo suficientemente alta ¿Podría alcanzarlas? No, eso es una tontería, nadie es tan alto ¿Y si salto? No, nadie puede saltar tanto ¿Y si vuelo?

Cuidado con la puntuación: En esta oscura noche, mientras todos beben y se ríen de sus estupideces, miro el cielo estrellado que se alza sobre mi cabeza y me pregunto: si me vuelvo lo suficientemente alta, ¿podría alcanzarlas? No, eso es una tontería, nadie es tan alto. ¿Y si salto?

Citación :

Aquella idea fue mi único pensamiento por lo que parecieron horas ¿Cómo podría yo volar?

Te has comido el punto tras horas de nuevo.

Citación :

que mi padre había intentado con tanta desesperación crear, cuando aún estaba con vida ¿Entonces... Que haría? ¿Cómo llegaría a ellas?

Ídem.

Citación :

Aparte de mi mente todo recuerdo de ellos,

Aparté

Citación :

en que me abandono, solo que yo no las seco, las dejo caer una tras otra mientras miro las estrellas, mi única compañía.

abandonó

Ahora me doy cuento que cambias de tiempos verbales para una misma acción: generaliza uno: o pasado o presente; usas al principio pasado y luego presente: distorsionas el tiempo de la acción. Deberías cambiarlo. Aparte, añadiría otro consejo sobre la forma en que articulas el relato: construyes frases cortas que podías unir a otras. Parece que quedan los párrafos como cortados. No hace falta que sean todos cortos.

Sobre el relato, personalmente no me gusta ese tono "de cuento", aunque también es verdad que tienes momentos tiernos... Te quedan mejorar cosas formales y seguir dándole en mi opinión. En eso es mejorable. Hay mucho camino, y aquí quizás podríamos darte consejos útiles. Por otro lado, yo creo que este relato es más bien dramático, más que realista. Es un "drama" con todas sus características. Yo lo movería a esa sección.

Un saludete de Samuel. Nos leemos.

Me ha encantado el relato, me he dejado llevar en volandas por él, sin pararme a mirar errores, sin que ninguno me perturbase lo más mínimo, solo quería saber como acababa. Me ha parecido genial, sencillamente genial.

Atentamente desde el bosque siniestro... un servidor.